La mayoría pagamos el mismo: 🕛🕧🕐🕜🕑🕝🕒🕞 horas y horas dedicada a algo que no te llena, horas lejos de tu familia, horas sin disfrutar de tus hijos, horas inviertidas en producir para otros. Al final son horas que vendes a cambio de tu tiempo. Esto siempre es así, solo debes preguntarte si vale la pena o no, si disfrutas de ese intercambio o no, si te llena el tiempo el tiempo invertido o al final es tiempo malgastado.
Yo he vivido siempre malgastando el tiempo, haciendo lo que debía hacer y dejándome para luego. He vivido centrada en las obligaciones y olvidando mis hobbies y mis sueños. Siempre he querido saber, aprender, mejorar y he estudiado mucho pero siempre quitándome horas de sueño porque no podía sacarlo de otro sitio. Satisfacción por esos esfuerzos y frustración por no atreverme nunca a poner en prácitca nada de lo que aprendía. Estudios, títulos y la misma vida pero cada vez más cansada y desolusionada.
Ahora paso mucho tiempo dedicada a mi formación pero son horas totalmente invertidas: en mí, en mi desarrollo personal, en mi negocio, en mi futuro… ¿y lo mejor? excepto eventos concretos, siempre puedo hacerlo cuándo quiero y dónde quiero y eso significa poder integrarlo en mi familia y conciliar con mis circunstancias. Ahora voy a poner en práctica todos los conocimientos que adquiero, tanto a nivel personal como profesional. Ahora sé que hay herramientas y oportunidades para cambiar mi vida.
Hay que sacrificar algo para tener luego la vida que quieres, siempre se pagan precios pero asegúrate que sea el que más te acerca a tu meta. “Vive unos años como nadie quiere y el resto de tu vida como nadie puede”
¿Cómo vives tú? ¿Inviertes o malgastas tu tiempo? Te leo!
Susana Guilló - Conóceme